
Así lo anunció el lunes el presidente Andrés Manuel López Obrador, que urgió a indagar los motivos de lo que calificó como un “ataque cobarde” y a castigar a los responsables.
“Todo indica que no fue un enfrentamiento sino que fue un comando que disparó a gente que no estaba en plan de confrontación”, afirmó el mandatario.
El sábado individuos armados que se trasladaban en varios vehículos descargaron sus armas contra ciudadanos comunes, entre ellos taxistas, obreros y un estudiante de enfermería. En los ataques perecieron 15 ciudadanos, uno de ellos en un centro de salud, y cuatro civiles armados que murieron en enfrentamientos con la policía, precisó el gobierno estatal.
“Existen elementos suficientes sobre la probable participación de grupos criminales vinculados a la comisión de varios delitos federales, entre ellos delincuencia organizada, que tendrían relación con agrupaciones criminales que operan en la región de Matamoros, Río Bravo y Reynosa”, señaló el gobierno de Tamaulipas en un comunicado el lunes en el que indicó también que la fiscalía estatal trabajará con la federal para esclarecer los hechos.
Reynosa es escenario habitual de actos de violencia vinculada al crimen organizado y punto estratégico de los tráficos ilegales. En esa región, la parte más oriental de la frontera entre México y Estados Unidos, opera el Cártel del Golfo, que tienen en su seno distintos grupos que luchan entre sí para controlar territorios clave para el trasiego de droga y de migrantes. Aparentemente una de las células de una localidad cercana es la que entró en Reynosa y cometió los ataques.

El Instituto Nacional de Salud declaró el domingo que la variante, detectada originalmente en la India, constituye el 60% de los casos nuevos en la zona capitalina.
Debido a la tendencia, las autoridades de Portugal prohibieron a partir del viernes pasado todo el acceso a la capital los fines de semana. La zona metropolitana tiene unos 2,8 millones de habitantes.

Un comunicado del Ministerio Público señaló que la misma medida se ha dispuesto contra el empresario Gerardo Baltodano, propietario de la empresa Café Soluble, debido a que, al igual que Humberto Belli, no se presentó a un citatorio de la Fiscalía en días pasados.
Baltodano es hermano del general del ejército retirado Alvaro Baltodano, quien ha sido funcionario del gobierno de Daniel Ortega como director de la Corporación de Zonas Francas. Belli, por su parte, fue ministro de Educación de 1990 a 1997 y es hermano de la conocida poeta y novelista Gioconda Belli.
La escritora informó en su cuenta de Twitter que la policía estaba allanando la noche del jueves la casa de su hermano.
La medida es parte de una investigación iniciada por el gobierno contra 13 empresarios directivos de la no gubernamental Fundación Nicaragüense para el Desarrollo (Funides), cuyo ex director Juan Sebastián Chamorro fue detenido a inicios de este mes junto a otros 15 opositores.
Más temprano, la Fiscalía informó que una jueza local decidió levantar el sigilo bancario y “congelar” las cuentas de los 13 investigados, a quienes se les prohibió abandonar el país. Al grupo se le investiga por supuestas “operaciones financieras derivadas de actividades ilícitas” a través de Funides.

La segunda vuelta se efectuó hace 13 días, pero el resultado definitivo se ha atrasado en forma inédita porque la derechista Fujimori pidió anular miles de votos del izquierdista Castillo quien, luego de contarse todos los sufragios, terminó primero con un ajustado 50,125%, seguido de Fujimori con 49,875%.
Las calles de Lima se vieron colmadas de simpatizantes de ambos candidatos que marcharon por diferentes zonas del casco histórico. Más de 3.000 policías vigilaron a ambos grupos que estaban distantes por decenas de cuadras y no hubo actos de violencia.
La derechista no ha concedido el triunfo. El sábado dijo ante sus partidarios que Castillo hizo “trampa” y “no vamos a aceptar que se roben nuestros votos”. Sus seguidores vestían la camiseta de la selección de fútbol y tenían carteles con frases como “no al fraude, lucharé hasta morir” o “democracia sí, comunismo no”. Una persona cargaba una imagen del “Señor de los Milagros”.
Fujimori acusa a Castillo de ser comunista, violento, de tener nexos con el grupo terrorista Sendero Luminoso y de querer implantar en un eventual gobierno políticas parecidas a las del presidente venezolano Nicolás Maduro y su antecesor Hugo Chávez.
“¿Ustedes quieren el comunismo?, ¿Ustedes quieren un Perú como Maduro y con Chávez?”, dijo Fujimori. Sus seguidores replicaron con un rotundo no.

En su último informe de tendencias globales de desplazamientos forzados, ACNUR dijo que la cifra total de desplazados en el mundo aumentó por noveno año consecutivo hasta alcanzar los 82,4 millones de personas, el equivalente casi a la población de Alemania.
Filippo Grandi, el alto comisionado de la ONU para los refugiados, explicó que los conflictos y el impacto del cambio climático en lugares como Mozambique, la región etíope de Tigray y la zona del Sahel, en África, fueron algunos de los focos de los nuevos movimientos de refugiados y desplazados internos en 2020.
Éstos sumaron cientos de miles de personas más a un conteo que, durante años, ha estado dominado por los millones que huyeron de países como Siria y Afganistán debido a las prolongadas guerras y combates.
“Es revelador que en un año en el que todos estuvimos confinados, encerrados en nuestras casas, en nuestras comunidades, en nuestras ciudades, casi tres millones de personas tuvieron de dejar atrás realmente todo lo que tenían porque no tuvieron otra opción”, apuntó Grandi en una entrevista previa a la publicación del reporte.
“El COVID-19 parece no haber tenido impacto alguno en algunas de las causas fundamentales que empujan a la gente a huir”, agregó. “La guerra, la violencia, la discriminación han continuado, pase lo que pase, durante la pandemia”.