WASHINGTON (AP) — La escritora de textos de autoayuda Marianne Williamson ha lanzado un nuevo intento imposible para llegar a la Casa Blanca convirtiéndose en la primera demócrata en desafiar al mandatario Joe Biden por la nominación en 2024.

En 2020, Williamson buscó la candidatura presidencial demócrata para la que había apelado más a sus extravagantes llamados a la sanación espiritual que al apoyo de los electores.

“Estamos disgustados por este país, estamos preocupados por este país”, dijo Williamson el sábado ante una multitud de más de 600 personas al arranque de su campaña en la capital de la nación.

“Es nuestro trabajo crear una visión de justicia y amor tan poderosa que anule a las fuerzas del odio, la injusticia y el miedo”.

La autora, de 70 años, que alguna vez fue asesora espiritual de Oprah Winfrey, sólo representará una oposición simbólica en las elecciones primarias, muestra del firme respaldo de los demócratas a Biden a nivel nacional.

Como sea, Williamson propinó un codazo alegórico al mandatario, quien fue por mucho tiempo un asiduo pasajero en Amtrak, ya que efectuó su acto político de arranque de campaña en la ornamentada Suite Presidencial, que tiene columnas de mármol, en Union Station, el principal centro ferroviario de Washington.

Biden pronunció su propio discurso desde Union Station poco antes de las elecciones de noviembre pasado, cuando contribuyó a que los demócratas tuvieran un desempeño sorprendentemente fuerte después de que exhortara a los electores a que rechazaran el extremismo político y afirmara que la “democracia misma” estaba en juego.

Williamson, cuyos carteles de campaña rojos, azules y negros incluyen los lemas juntos “Un nuevo comienzo” y “Cortar al sistema”, afirma que hará campaña en los estados donde se adelante la votación en el calendario electoral 2024.

Esto incluye Nueva Hampshire, que ha amenazado con impugnar un plan del Comité Nacional Demócrata y respaldado por Biden para que Carolina del Sur sea el estado donde comience la contienda por la candidatura.

Los demócratas y republicanos en Nueva Hampshire han advertido que si Biden se salta las primarias no autorizadas en el estado y un rival gana, el resultado podría ser avergonzante para el mandatario, incluso si el contrincante no tiene posibilidades reales de ganar la nominación.