KIEV, Ucrania (AP) — Al menos seis civiles murieron en los últimos ataques rusos en una localidad en el epicentro de los combates, según dijo un gobernador regional en el este de Ucrania.

Otras ocho personas resultaron heridas en los ataques sobre Sievierodonetsk en las últimas 24 horas, el gobernador de Serhiy Haidai. El funcionario acusó a las tropas usas de atacar refugios de civiles de forma deliberada.

La localidad se encuentra en el Donbás, el corazón industrial en el este de Ucrania, donde las fuerzas rusas han presionado en su ofensiva pese a la firme resistencia ucraniana.

Separatistas con apoyo de Moscú combaten a fuerzas ucranianas en el Donbás desde hace ocho años y controlan un extenso territorio. Sievierodonetsk y las ciudades vecinas son la única parte de la región de Luhansk, en el Donbás, que sigue bajo control de Ucrania.

El presidente de Ucrania, Volydmyr Zelenskyy, dijo el martes por la noche que las fuerzas del país en la región enfrentan una situación difícil.

“Prácticamente toda la fuerza del Ejército ruso, la que les queda, se está arrojando en la ofensiva aquí”, dijo en su mensaje vespertino al país. “Liman, Popasna, Sievierodonetsk, Slaviansk, los ocupantes quieren destruirlo todo allí”.

Mientras tanto, no parecía haber una solución inminente para sacar trigo de Ucrania.

Las autoridades militares británicas calificaron de “muy improbable” que las rutas terrestres de exportación en Ucrania pudieran compensar los problemas causados por el bloqueo ruso en el puerto de Odesa, en el Mar Negro, que ha hecho subir aún más los precios globales del grano.

En un reporte publicado el miércoles, el Ministerio británico de Defensa dijo que no ha habido un tráfico “significativo” de mercantes que entraran o salieran de Odesa desde que comenzó la invasión rusa.

El bloqueo, combinado con la falta de rutas terrestres de mercancías, implica que suministros significativos de grano siguen en los almacenes y no pueden exportarse.