
“Creo que es uno de los himnos más bonitos que se han escrito del pop en la historia, el mensaje no puede ser más conciliador y venir más ad hoc que en este momento”, dijo el viernes en entrevista por videollamada desde Andalucía, España, la tierra de su familia.
“El deporte y las olimpiadas representan la magia que nos hacía falta al mundo entero”, agregó.
Sanz cantó “Imagine”, original del rockero británico John Lennon y su esposa japonesa Yoko Ono, en un video pregrabado junto con el estadounidense John Legend, el australiano Keith Urban y la beninesa Angelique Kidjo. Los organizadores buscaban tener músicos de todos los continentes representados con la canción.
Fueron convocados por el compositor de música para cine alemán Hans Zimmer, quien se encargó de la producción de esta versión.
“Me mandaron los arreglos de Hans Zimmer que son espectaculares, son apasionantes como todo lo que él hace en el cine”, dijo Sanz.
“Aproveché para grabarlo (el audio) en mi casa y nos fuimos a un estudio para poder hacer el fondo verde (del video) y hacer esta pequeña simulación de actuación porque allí en Tokio estaba muy limitado el tema de actuaciones y demás”, explicó.
Para Sanz lo más especial de “Imagine” es que es una canción que ha hecho soñar con un mundo mejor, un espíritu que representan los Juegos Olímpicos. El músico dijo que tan solo con ver a los deportistas ya en el estadio durante la ceremonia despertó en él esta esperanza.

El dúo puertorriqueño festeja dos décadas de trayectoria con “El Sistema”, un álbum para el que convocaron a invitados estelares como Sech, Myke Towers, Rauw Alejandro y Natti Natasha.
“Súper contentos la verdad”, dijo Lennox en una entrevista por videollamada desde Miami. “Emocionados con todo esto que está pasando con el género urbano que está todo el mundo contagiado, que estamos en todo el mundo”.
“Estamos aprovechando todo al máximo haciendo buena música, dándole al público lo que pide”, agregó.
Zion, por su parte, expresó que lo que más contentos los tiene es seguir vigentes y produciendo canciones populares.
“En la consistencia está la clave”, dijo. “Zion y Lennox hemos demostrado ser un dúo consistente por más de 20 años. Es una bendición seguir ahí en el ojo público y seguir en el agrado de todos”.
Su cuarto álbum de estudio incluye temas que lanzaron previamente y que ya han acumulado millones de vistas con sus videos en YouTube. Entre ellos están “No me llama” con Myke Towers, “Te mueves” con Natti Natasha, “Gota Gota” con El Alfa y “Sistema”.
Con el disco presentan el sencillo “Estrella”, sobre una chica que se ve muy bien cuando baila, y su respectivo video filmado en República Dominicana.
En el clip, el dúo aparece en una mansión en la que, gracias a los efectos especiales, Zion canta y baila sobre el agua de una piscina acompañado de chicas en bikinis y trajes de baño blancos. Lennox le responde con otros versos rodeado de chicas en trajes de baño y bikinis negros.
“El video está espectacular”, dijo Lennox. “Tiene esa esencia de lo que es Zion & Lennox, es bien bailable, bien sexy y tropical a la vez”.
“Es un tema dedicado a la mujer, pero con mucho sazón, con mucho sabor, muy bailable, con ritmo de reggaetón para retumbar las bocinas”, agregó Zion.
“Entendemos”, con el astro panameño Sech, habla de parejas apasionadas que discuten y luego se reconcilian en la cama.

El álbum incluye el sencillo “No lo beses”, que transformó de una versión pop a una mariachi-norteña.
“Es una canción que se hizo un éxito, un clásico en mis conciertos, pero que nunca había sido un sencillo en radio ni habíamos hecho un video”, dijo Fernández.
La versión original del tema, incluida en su álbum “Dos Mundos - Evolución” de 2009, era pop con piano y acordeón. Ahora, adquirió un mayor sentimiento con la nueva fusión e instrumentos como tuba, trompetas, violines y guitarra sierreña.
“Quedó increíble”, dijo Fernández. “Más dramática”.
La canción habla del dolor de ver a una expareja enamorada de otro.
“Retorciéndote las tripas”, dijo por videollamada desde su casa en Guadalajara. “Es difícil pasar por esos momentos cuando tomas la decisión de terminar una relación y ver que cada quien va a tener que hacer sus vidas y retomar sus relaciones... Siempre hay una persona a la que le cuesta más trabajo y le duele más”.
El video musical, dirigido por Antonio Roma, fue filmado en un estudio en la Ciudad de México. En él, Fernández aparece muy apasionado una modelo.

Esas canciones de videojuegos que se quedan pegadas en tu cabeza.
Un popurrí orquestal de canciones de videojuegos japoneses emblemáticos sirvió como banda sonora para el desfile de países en la ceremonia de inauguración. El arreglo incluía canciones de juegos desarrollados por SEGA, Capcom y Square Enix.
Las canciones de los videojuegos suelen ser tomadas como ruido molesto por algunos, pero no en Japón, donde la música que acompaña los juegos es considerada un arte.
Los compositores de música para videojuegos son famosos en Japón y NieR, una de las series incluidas en el desfile, ha colocado tres de sus bandas sonoras en las listas de popularidad japonesas.
La primera canción interpretada el viernes fue “Roto’s Theme” de la serie Dragon Quest, un juego enormemente influyente, considerado el primer juego de rol de consola e iniciador del género. La serie se volvió tan popular en Japón que 300 estudiantes fueron arrestados por ausentismo escolar después de dejar la escuela para comprar Dragon Quest III.
La música de Final Fantasy es una de las más conocidas para el público occidental. El desfile incluyó el tema principal de Final Fantasy y “Victory Fanfare”, la canción que suena cuando un jugador gana un combate. Ambas han sido parte de la serie de su primera a su 15ª edición.
Otra canción bastante conocida que se incluyó fue “Star Light Zone”, de Sonic original. Además de aparecer en ese juego un remix que estaba incluido en la versión DS de Mario & Sonic sonó en los Juegos Olímpicos.
Muchos de los temas emblemáticos de otros juegos de Nintendo, como Mario Bros. y The Legend of Zelda, no se incluyeron en el desfile. Los productores tampoco incluyeron los jingles más cortos de videojuegos anteriores como Pac-Man y Asteroids.

Eso se debe a que el documental “Val” se creó a partir de miles de horas de video que Kilmer filmó desde que era un niño: creciendo, en sets de películas, en automóviles, en hospitales. Es el crédito a un cinefotógrafo de toda la vida.
Gracias al incansable impulso de Kilmer por documentar las cosas, “Val” es una película notablemente íntima y también conmovedora. Para un artista considerado a veces frío y difícil, este documental no contrarresta esas percepciones tanto como las explica.
“Me he portado mal. Me he portado valientemente. Me he portado de forma extraña con algunos. No niego nada de esto y no me arrepiento porque he perdido y hallado partes de mí mismo que nunca supe que existían”, dice hacia el final. “Y soy bendecido”.
En realidad, le deja gran parte de la conversación a su hijo Jack. La voz de Kilmer se ha visto afectada por los tratamientos contra el cáncer de garganta y Jack narra la mayor parte de la película utilizando las palabras de su padre. “Ahora que es más difícil hablar, quiero contar mi historia más que nunca”, dice Kilmer.
“Val” no sería la película que es si Kilmer no hubiera sido uno de los primeros en acoger las cámaras de video portátiles, presentándonos películas caseras, cintas de audición y audiciones en vivo. “Lo he guardado todo”, confiesa. La suya es una razón legítima para ser un coleccionista.
Los créditos cinematográficos de Kilmer incluyen Batman en “Batman Forever” (“Batman eternamente”) de 1995; el descarado piloto de combate, teniente Tom “Iceman” Kazansky, en el éxito de 1986 “Top Gun”, y el ícono del rock Jim Morrison en la película de Oliver Stone de 1991 “The Doors”.