
La ley designa a las pandillas Barrio 18 y Mara Salvatrucha como grupos terroristas, aumenta las penas de prisión para los pandilleros condenados por delitos y ordena la construcción de una nueva prisión para pandilleros.
La legislación, que había estado en el limbo durante años, cobró impulso tras la fuga de 20 miembros de Barrio 18 de una prisión a principios de este mes. Esta falla de seguridad llevó al presidente Bernardo Arévalo a aceptar las renuncias de tres altos funcionarios de seguridad la semana pasada.
El martes, antes de que se aprobara la legislación, Arévalo dijo que la fuga había sido un complot coordinado por la pandilla, que se vio frustrada por las medidas que estaba tomando su entonces ministro del Interior, Francisco Jiménez, para endurecer sus condiciones en prisión.
También el martes, la policía dijo que un cuarto miembro de la pandilla que escapó con el grupo había sido recapturado.
En septiembre, la administración Trump designó a Barrio 18 como organización terrorista extranjera, algo que ya había hecho con la Mara Salvatrucha.
El vecino de Guatemala, El Salvador, ha diezmado con éxito las pandillas en su territorio, pero lo ha hecho suspendiendo algunos derechos fundamentales bajo un estado de emergencia que dura más de tres años y encarcelando a más de 80.000 personas.
Aun así, su éxito en materia de seguridad ha atraído la atención de otros líderes de la región y ha aumentado los pedidos de sus electores para que se adopten medidas más duras contra las pandillas.
(Foto AP/Moises Castillo)