TesoroASHINGTON (AP) — El número de familias que reciben asistencia de emergencia para pagar el alquiler ha ido en aumento constante en los últimos meses, sin un incremento marcado en el número de personas que son desalojadas de sus viviendas a pesar de que expiró una moratoria federal a los desahucios, informó el lunes el gobierno del presidente Joe Biden.
Nuevas cifras dadas a conocer por el Departamento del Tesoro, que supervisa el programa de Asistencia de Emergencia para Alquiler, revelaron que el número de familias que reciben los beneficios aumentó un 10% durante septiembre, hasta llegar a 510.000 familias en comparación con 459.000 en agosto.
“No ha habido un aumento importante de desalojos a nivel nacional después de que expiró la moratoria federal, y las solicitudes de desalojo permanecen por debajo de los promedios históricos”, señaló el Departamento del Tesoro en un comunicado, citando datos del Laboratorio de Desahucios de la Universidad de Princeton.
El Congreso autorizó 46.500 millones de dólares en asistencia de emergencia para alquileres a finales del año pasado. Pero el lanzamiento del programa se vio afectado por la lentitud en la entrega de ayuda, y funcionarios del gobierno culparon públicamente a socios municipales y estatales de entorpecer el proceso con burocracia excesiva y lentitud en la reacción.
En respuesta, el gobierno emitió nuevas directrices durante el verano, alentando a los estados a reducir el papeleo y permitir a los solicitantes “avalar por sí mismos” sus adversidades sin tener que presentar estados bancarios o comprobantes de pago.
Gene Sperling, asesor de Biden en las labores de asistencia contra desahucios, señaló que este proceso acelerado ayudó a agilizar el flujo de fondos para mantener a las familias desesperadas viviendo en sus casas.
Los fondos para asistencia de alquiler están “haciendo una diferencia significativa en prevenir el temido incremento en los desalojos, pero aún es insuficiente”, dijo Sperling el lunes a reporteros. “Incluso con este mejor desempeño, sabemos que si no lo hacemos mejor a nivel nacional, cientos de miles de familias aún enfrentarán de manera innecesaria... un riesgo de ser desalojadas”.
El gobierno de Biden permitió que la moratoria federal de desahucios concluyera al finalizar julio, y luego la reactivó unos días después en respuesta a la presión de aliados políticos. Pero la Corte Suprema dictaminó a finales de agosto que el gobierno carecía de autoridad para suspender los desalojos, y el Congreso no ha intervenido.